También hubo una objeción por parte de muchos aficionados de la AFL acerca de la pérdida, con motivo de la fusión, de la identidad de su liga, su logo y su nombre. En 1970, las ligas se fusionaron totalmente en una nueva adoptando el nombre actual de National Football League, dividiéndose en dos conferencias con un número igual de equipos cada una. Hubo también un acuerdo financiero por el que los equipos de la AFL pagarían un total en conjunto de $18 millones durante 20 años.